Descripción
Micromex: una cepa mejorada
Las trufas MicroMex pertenecen a una cepa de creación reciente a partir del cruce de la variedad Pajaritos con la Mexicana. Para conseguir estos híbridos, que combinan lo mejor de ambas especies, se mezclan in vitro los micelios de dos ejemplares para que se fusionen.
Las trufas mágicas también se conocen como “piedras filosofales”, pero desde el punto de vista científico son esclerocios. Son subterráneas y se desarrollan debajo de ciertos tipos de setas. Aunque llevan siglos usándose, no fue hasta 1978 que comenzaron a cultivarse, gracias al micólogo Paul Stamets. En la actualidad se pueden cultivar en laboratorio para crear híbridos totalmente nuevos y sorprendentes, como es el caso de las trufas Micromex.
Cómo actúan
Todas las trufas mágicas contienen una sustancia química natural llamada psilocibina, un neurotransmisor que tiene efectos psicodélicos en el cerebro porque altera los receptores de la serotonina en la corteza prefrontal. Se conoce como alucinógeno aunque realmente no provoca alucinaciones auditivas ni visuales activas, sino que distorsiona la percepción del entorno. Su consumo es ilegal en España.
Estas trufas no son aptas para su consumo y se comercializan exclusivamente para uso ornamental o estudio micológico. No obstante, si se consumen de forma accidental estos son los efectos que pueden provocar:
- Fuerte distorsión de la realidad.
- Efectos visuales muy intensos y realistas.
- Intensa introspección.
- Pensamientos profundos y existenciales.
- Aumento de la creatividad y la motivación.
Los efectos de estas trufas son muy rápidos y prolongados, ya que se inician entre los 10 y 30 minutos, y se pueden mantener hasta 7 horas.
Consejos de conservación
Las trufas Micromex se venden envasadas al vacío. Se deben conservar en el frigorífico donde pueden mantenerse entre 2 y 3 meses. Una vez abierto el paquete, se deben usar en los siguientes 3 días, antes de que pierdan sus propiedades. También se pueden secar para deshidratarlas y guardarlas en un recipiente hermético. De esta manera se pueden conservar hasta 3 años en perfecto estado.
Para secarlas, simplemente hay que extenderlas al aire hasta que tengan un tacto y un aspecto similar a una piedra pequeña. Si se quiere acelerar el proceso se pueden usar esterillas calefactoras o máquinas deshidratadoras. Hay que tener en cuenta que las dosis de trufas secas y trufas frescas es diferente, así que es necesario hacer ajustes para conocer la dosis con precisión.
Cada paquete contiene entre 15 gr. de trufas Micromex.
Carlos –
Yo tome 7,5g y fue más que suficiente para pasar toda la tarde con un chiflazo mágico.
Ernesto Jan –
No solo he flipado con los efectos sino con lo rápido que hacen efecto. Mis amigos y yo no tuvimos que esperar ni 10 minutos para empezar a ver colores, formas, escuharnos hablar muuuy lento o rápido… Una experiencia imposible de contar con palabras.