Los amantes de la micología disfrutan cultivando panes de setas de forma casera. Pero, como sucede con todo tipo de cultivo, existen múltiples amenazas al acecho. Por ello, requiere de un cuidado especial de ciertos factores con el fin de evitar su contaminación. Para aprender a identificar un pan de setas contaminado, se deben saber cómo reconocerlos. Toda la información sobre cómo descubrir cuando están contaminados se encuentra a continuación.
¿Qué es la contaminación en un cultivo de pan de setas?
A la hora de conocer cómo cultivar setas en casa se debe aprender a reconocer la contaminación de las mismas. La contaminación en los panes de setas alucinógenas hacen referencia a todo tipo de impurezas tanto del aire, suelo o agua que pueden afectar a los sustratos o micelios. Éstos suelen causar problemas a largo plazo, ya que se propagan con mucha rapidez, por lo que en cuanto aparecen habrá que deshacerse de cultivos contaminados y separarlos de aquellos que estén sanos. No obstante, la forma de actuar dependerá del tipo de contaminación que afecte.
Tipos de contaminaciones que existen
El pan de setas contaminado es muy sencillo de identificar, ya que el micelio siempre es blanco, por lo que si se ven otros colores, se puede estar seguro de que el cultivo está contaminado. Sin embargo, existen varias excepciones:
- El color azul puede indicar que hay contusiones en el micelio.
- El amarillo por su lado indica un envejecimeinto y por lo tanto está produciendo nuevas defensas contra las bacterias.
Los contaminantes suelen prosperar en el sustrato esterilizado, ya que no tiene tanta competencia como en la naturaleza. Esto se debe a que cuando crecen al aire libre, se genera una compleja relación entre bacterias, hongos y otros microorganismos, manteniendo el equilibrio ecológico. Así, no tienen que luchar con los contaminantes por el dominio del sustrato.
La mayoría de estos contaminantes se puede dividir en tres grupos:
- Bacterias: estos organismos unicelulares se reproducen con gran rapidez y se pueden combatir con la pasteurización.
- Hongos: entre los que resalta el moho, el cual crece en forma de filamentos llamados hifas.
- Plagas: se trata de unos minúsculos insectos que devoran los cultivos y transmiten enfermedades.
¿Cómo saber cuando un pan de setas está contaminado?
Para identificar cuando un pan de setas está contaminado habrá que prestar atención a los siguientes factores que indicarán que ésto está sucediendo:
- Presencia de manchas viscosas que aparecen tanto en el grano como en el micelio. Suele producirse por la aparición de bacterias, por lo que habrá que controlar la humedad para evitarlo. Puede que haya manchas marrones y amarillas, con costras o texturas gelatinosas.
- Existen múltiples hongos, por lo que puede ser más complicado de identificar. Uno de estos puede ser una sectorización dentro del cultivo de setas, es decir que las setas se resistan a unirse. En algunos casos de los más agresivos, deben detectarse con microscopio tomando una muestra.
- Otra señal que indica la textura arenosa, revisando con lupa.
- La decoloración y aparición de manchas verdes, azules, grises o negras dentro del recipiente fructificación
¿Cómo hacer frente a un cultivo contaminado?
Para hacer frente a algunos de los contaminantes más comunes se encuentran los siguientes:
Manchas bacterianas
Una vez se hayan formado los sombrerillos, pueden aparecer manchas o marcas de colores amarillos y marrones cerca de los sombrerillos. Esto pasa porque las bacterias se difunden vía aérea y sucede porque el pan se halla húmedo por un periodo superior a 4 horas tras el riego.
Si se quiere controlar la bacteria, se debe reducir la humedad y aplicar una solución de cloro de 150 ppm.
Podredumbre agria
Suele ser común cuando los granos se germinan en frascos, ya que el bacilo puede sobrevivir a la esterilización generando endoesporas resistentes al calor. Reconocerlo es sencillo, ya que se forma una especie de cieno gris con un olor potente y agrio haciendo que parezca excesivamente húmedo.
Para eliminar las endoesporas del grano, habrá que dejarlas a remojo a temperatura ambiente durante todo un día. Así las endoesporas germinarán y podrás esterilizarlas.
Moho verde
Éste es causado por Trichoderma harzianum y presenta un micelio de color blanco, generando esporas de un color verde esmeralda. Suelen aparecer por una mala esterilización de los ambientes. Para prevenirlo habrá que aplicar desinfectantes y mantener un estricto saneamiento. De la misma forma, hay que reducir la humedad y aumentar la circulación de aire.
Moho rosa y negro
El moho rosa, conocido como Neuroespora, es un hongo de crecimiento rápido que suele darse en el agar y el grano. Crece a través de tapones de algodón y discos filtrantes, siendo complicado de eliminar. Los cultivos que hayan sido contaminados por este hongo se deben destruir de forma inmediata y realizar una limpieza a fondo en toda la zona,
Por su parte, el moho negro, amarillo o de otros colores, aparecen igualmente en los cultivos de grano y agar. Llamados Aspergillus, prefieren aquellos cultivos con un pH casi neutro y presentan un gama de colores que va variando del amarillo al negro. Algunas de estas especies son tóxicas, pudiendo ser mortales, por lo que se deben manejar con cuidado.
Burbuja seca
Se trata de una enfermedad causada por el hongo Virtillicium que provoca que las esporas se vuelvan pegajosas. Los cambios que produce varían en función de la etapa de desarrollo. Cuando se trata de una infección temprana se podrán ver manchas del tamaño de una cabeza de alfiler, para más adelante generar una retorcida seta con el sombrero ladeado. Sus esporas son pegajosas y se difunden a través de partículas de polvo, por lo que la forma de evitarlo es alejando las setas de la tierra.
Ácaros y mosquitos de los hongos
Los mosquitos de los hongos son insectos voladores de pequeño tamaño que se alimentan del micelio, creando túneles en los tejidos de las setas, los cuales se llenan de bacterias. Éstos miden unos 0,3 cm, con colores grises y negros.
Por otra parte, los ácaros suelen ser beneficiosos para los cultivos, pero existen ciertas especies que se alimentan del micelio de la seta y la destruyen, dando con una decoloración de la superficie. Para controlar tanto a los ácaros como a los mosquitos habrá que mantener un estricto saneamiento e higiene de la zona de cultivo.
Saber reconocer un pan de setas contaminado puede evitar perder la cosecha y proporcionarle el tratamiento que necesita a tiempo. Para ello, es recomendable observarlos con detalle y con cierta frecuencia para evitar posibles problemas.
