La llegada del otoño trae consigo la temporada de recogida de setas. La bajada de las temperaturas y la humedad producida por las lluvias en esta época del año, favorecen la aparición de estos hongos. Algunos de ellos son comestibles, pero otros pueden resultar tóxicos. Los amantes del turismo micológico deben tener unos conocimientos básicos sobre la variedad de especies, o bien ir acompañados de un profesional. Los apasionados del monte, la naturaleza y la gastronomía, pueden encontrar en España multitud de lugares para recoger setas, en los que se reproducen y en los que, cada año, se organizan rutas específicas para su recolección. Antes que nada, hay que asegurarse de contar con todos los permisos necesarios para la zona en la que se van a recolectar. Algunas se encuentran en zonas protegidas o limitadas.
Los mejores lugares para recoger setas en España
España posee diferentes zonas ricas en especies micológicas que con el inicio de esta estación mágica como es el otoño, se llenan de aficionados a la recolección de setas.
Asturias
El Principado de Asturias es uno de los lugares favoritos para los amantes de la micología para recoger setas. Esta zona da comienzo a la temporada de recolectar setas en primavera con la aparición de las morchelas. Sin embargo, es en otoño cuando proliferan prácticamente todas las variedades. El mejor enclave es el bosque de Muniellos, aunque también se pueden visitar municipios como Cangas de Narcea o Piloña.
Navarra
La comunidad foral posee uno de los espacios más destacados para la recolección de setas, el Parque Micológico de Ultzama. Este lugar tiene una extensión de 98 kilómetros cuadrados y lo forman 14 concejos.
Bajo las grandes extensiones de hayedos y robledales se pueden encontrar cientos de variedades, entre las que destacan 13: la amanita enrojeciente, pardilla, gamuza, seta de marzo o las rozites, entre otras.
Castilla y León
En la provincia de Soria se encuentra la población de Navaleno, que junto con los bosques de San Leonardo de Yagüe son referentes nacionales para los amantes de la micología, por sus extensos bosques y pinares. Es tal la tradición de recolectar setas en esta zona, que cuando da comienzo la temporada, la Asociación Micológica de Navaleno organiza las Jornadas Micológicas donde se celebran diversas actividades en torno a este alimento.
Cataluña
Una de las zonas más destacadas para recoger setas en Cataluña es el Parque Natural del Montseny, situado en Barcelona. En la provincia de Lleida, muy cerca del Valle de Arán se encuentra la comarca de la Alta Ribagorça, otro de los enclaves más señalados para la búsqueda y recolección de setas.
Comunidad Valenciana
Uno de los lugares con más producción de hongos en esta autonomía es la comarca de la Vall d´Albaida situada en la provincia de Valencia. En sus bosques nace el rovelló, la especie más característica de esta comunidad.
Andalucía
En Andalucía destaca el Parque Natural Sierra de las Nieves, en Málaga, donde se puede disfrutar de hasta 400 especies de hongos diferentes. En la provincia de Jaén se encuentra el Parque Natural Sierras de Cazorla, Segura y Las Villas, otro de los puntos más destacados del sur de España para la recolección de setas.
Extremadura
En Cáceres es muy frecuente acudir a los valles de Ambroz y del Jerte donde proliferan níscalos y boletus. Ambos lugares celebran de manera anual jornadas micológicas con el inicio de la temporada.
Madrid
Desde la Sierra de Guadarrama se organizan todos los años jornadas micológicas, con el objetivo de acercar la naturaleza a los visitantes. Realizan rutas por los bosques de municipios como Cercedilla, Rascafría o Miraflores de la Sierra, donde un experto micológico acompaña a los turistas para ayudarles a diferenciar especies e identificar las características de cada hongo.
Consejos para la recogida de setas
El mundo de la micología tiene sus particularidades. Entre estas destacan, la forma en la que se cortan las setas, los materiales y herramientas utilizadas para su recogida y las distintas tipologías que existen. Se debe prestar especial atención, pues algunas de ellas pueden ser tóxicas y no se deben consumir.
Debido al aumento de este tipo de turismo, son muchos los centros de interpretación que ofrecen cursos sobre micología para el estudio de los hongos. De esta manera, aventurarse en la búsqueda de setas será más seguro al conocer mejor las distintas variedades.
¿Cómo se cogen las setas?
Las setas no se pueden coger de cualquier manera, porque si se hace de forma errónea es posible matar su matriz. Lo más adecuado es cortarlas con una navaja de manera horizontal justo en la base para respetar el micelio. En el caso de los boletus sí se pueden arrancar con la mano.
Si durante la excursión se encuentra algún ejemplar tóxico, estos no se deben destruir ni coger, su consumo es perjudicial pero forman parte de la naturaleza y su ecosistema.
¿Qué kit llevar a los lugares para recoger setas?
Puede que, al hablar de la recolección de setas comestibles, venga a la cabeza la imagen de una cesta. Este es uno de los puntos básicos de cualquier aficionado a la micología. Cuando se cortan hay que guardarlas en un cesto, nunca una bolsa de plástico ni de tela, ya que necesitan transpirar.
Al colocarlas en la cesta, se favorece que sus esporas caigan al suelo y nazcan más ejemplares. Asimismo, al estar húmedas se conservarán mejor y tardarán más tiempo en estropearse. Lo ideal es consumirlas en un corto espacio de tiempo tras su recolección.
Por otra parte, hay que recordar que las setas se encuentran en zonas boscosas, por lo que es esencial ir bien equipado con ropa y calzado adecuados para tal fin.
Pasear por el bosque, y después disfrutar de una cata con productos frescos puede convertirse en uno de los mejores planes del otoño. Además, las setas y boletus ofrecen abundantes posibilidades para su preparación, ya sea revueltos, a la plancha, asados o como los ingredientes principales de un guiso.