Líquenes: que son

Líquenes: ¿Qué son y cuál es su función?

Todo el mundo ha podido observar en la pared, el suelo o la corteza de algún árbol alguno de estos organismos, con una forma similar a una mancha y que recuerda al musgo. Liquen es una palabra que se ha utilizado históricamente con diversos significados. Muchas veces se confunden con el musgo u otro tipo de plantas de reducido tamaño. A continuación, se explican todas las características que permiten diferenciar los líquenes de otro tipo de microorganismos. 

¿Qué son los líquenes?

Los líquenes son unos organismos complejos formados por la simbiosis o la unión íntima de un hongo y un organismo fotosintético que suele ser un alga verde o una cianobacteria.  Estos organismos son supervivientes capaces de colonizar casi todos los ecosistemas que se conocen, gracias a su alta capacidad de adaptación. Por ello, se pueden encontrar en diferentes líquenes en desiertos, bosques y hasta zonas polares, ocupando un 8% de la superficie terrestre, por su capacidad para sobrevivir en condiciones meteorológicas extremas.

Debido a esta capacidad, tanto los hongos como los vegetales se unen para conseguir llegar a lugares donde solos no podrían hacerlo. Así el alga aporta los nutrientes, como hidratos de carbono o compuesto a base de nitrógeno, mientras el hongo le proporciona la capacidad de adherirse a cualquier sustrato y la protección, además de sales y agua. Es decir, una parte pone el hábitat y la otra el alimento. 

Se debe saber que se llama micobionte a la parte fúngica y fotobionte a la otra parte. Asimismo, en muchas especies de líquenes se puede encontrar levadura, un hongo unicelular. Este se descubrió recientemente, por lo que no se conoce todavía con seguridad cuál es su papel aunque se cree que es la encargada de segregar ciertas moléculas para proteger y darle estructura del liquen.

Características de los líquenes

Características de los líquenes

Entre las principales características que permiten diferenciar los líquenes de otro tipo de hongo, e incluso del musgo, estarían las siguientes:

  • La forma del liquen normalmente está dominada por el micobionte, mientras el fotobionte se ubica en la periferia para coger la luz.
  • Sobreviven a sequías muy prolongadas, incluso si duran años.
  • Siempre es el fotobionte el que proporciona la energía al conjunto, siendo el micobionte el encargado de proporcionar su resistencia frente a la desecación.
  • Pueden vivir en gran variedad de hábitats de todo tipo.

¿Cuál es el papel de los líquenes?

Los líquenes destacan por su gran importancia biológica y aquí se encuentran algunas de las principales razones para ello:

  • Son colonizadores en la gran mayoría de los ecosistemas primarios.
  • Al sobrevivir en medios hostiles y áridos, cuando mueren se convierten en parte del humus, enriqueciendo el suelo lo cual permite que otras plantas y organismos puedan vivir en él.
  •  Al morir, algunos líquenes liberan sustancias ácidas, para ayudar a la descomposición de las piedras, creando un sustrato más habitable.
  • Son aptos para el consumo alimentario humano, apareciendo en varias gastronomías del mundo.
  • Se pueden usar como componentes de perfumes y colorantes, incluyéndose en la fabricación de cosméticos.
  • Se han utilizado tradicionalmente en medicina por sus propiedades antiobióticas. Hoy en día, en la medicina moderna sirve como fármaco antitumoral, antimicótico, antiinflamatorio y antibiótico.
  • Miden la calidad del aire, siendo muy longevos y sensibles a los aires contaminados. Además, se recuperan de manera rápida cuando vuelven a las condiciones adecuadas.
Líquenes

Tipos de líquenes

En la actualidad, se pueden citar 7 tipos de líquenes que se diferencian por la forma en que se fijan al sustrato y su morfología.

  • Foliáceos: son aquellos que se desarrollan sobre la superficie del sustrato y se extienden por ella.
  • Fruticulosos: adoptan la silueta de un arbusto pequeño y se fijan al sustrato en un punto o superficie de unión reducida.
  • Escamosos: el borde no se encuentra pegado al sustrato, creando un tapiz de escamas próximas las unas a las otras.
  • Filamentosos: generan una red de filamentos o hilos de pequeño grosor y enmarañados.
  • Gelatinosos: si cuentan con la suficiente humedad, la textura se vuelve blanda, flexible y carnosa. Muchas veces en estos casos se pueden volver translúcidos.
  • Crustáceos: los más conocidos. Se adhieren con gran fuerza al sustrato en el que se desarrollan, siendo casi siempre rocas, maderas muertas, hojas o troncos.
  • Compuestos: cuentan con dos tipos juntos, el escamoso o crustáceo, y luego uno secundario fruticuloso.

Todas las especies de líquenes que se pueden descubrir cuentan con una función biológica muy importante, además de funcionar como indicadores de la calidad del aire y la contaminación. Es importante conocer la diferencia entre estos y el musgo, para poder reconocerlos de manera sencilla.

Sobre Sandra Rufo Clara

Sandra Rufo Clara empezó a recoger setas comestibles a los 3 años y desde que nació le han enseñado los cuidados más importantes de las mismas. A los 17 empezó a buscar información y a experimentar por su cuenta con otro tipo de setas. Con más de 20 años de experiencia es considerada toda una experta, pues conoce la gran mayoría de setas y trufas alucinógenas que crecen alrededor del mundo. Ahora, trabaja de lleno en el sector, y una de sus pasiones es compartir su conocimiento sobre él.

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