La recolección de setas por los humanos se remonta a cientos de años atrás, normalmente con fines alimentarios, aunque en algunas épocas han estado mal vista y ligadas a la brujería. En esta última década se ha notado un claro incremento de nuevos aficionados a este curioso y apasionante mundo de recoger setas.
Aúna el ejercicio al aire libre con entornos rurales, bonitos paisajes y tras su recolección brinda unos manjares exquisitos; como el que nos proporciona la variedad Amanita caesarea, “Huevo de rey”, o el apreciado Boletus eduli.
Son innumerables la cantidad de variedades de setas que podemos encontrar dentro del territorio español, siendo las más conocidas popularmente por sus propiedades culinarias las setas de cardo, los rebollones o níscalos, o las distintas clase de boletus, así como, las trompetillas, senderuelas, colmenillas o el champiñón silvestre.
Cada vez son más las personas que esperan con ganas las distintas épocas de recolección de setas.
«Si el verano es lluvioso será una buena temporada de setas», dicen con ilusión los veteranos recolectores de hongos, esperando ver llover en los meses de septiembre y principios de octubre.
El otoño es la mayor época de recolección de setas, las grandes brotadas se dan en condiciones concretas de temperatura y humedad. Esto hace que cada año sea diferente tanto la fecha de recolección como la cantidad que brota. Por ello, a veces se puede salir a buscarlas sin éxito y otras, con un éxito desmesurado. Esto crea una especie de nerviosismo agradable, la incertidumbre de no saber cómo se dará el día que empuja a aventurarse al bosque en busca de los primeros indicios del comienzo de la temporada.
Equipación adecuada para una jornada micológica
Una de las cosas más importante cuando nos disponemos a realizar un viaje con el fin de recoger setas es ser precavido y llevar con nosotros todo los artículos que nos puedan hacer falta durante la jornada micológica.
Es imprescindible llevar un calzado adecuado. Botas específicas de montaña, si es posible, de caña alta que cojan bien el tobillo, evitando así torceduras. Es recomendable que éstas contengan materiales impermeables como el gore tex el cual aísla de la humedad proporcionando un entorno seco para los pies.
Hay que tener en cuenta que en una jornada micológica se suelen andar varios kilómetros por distintas pendientes irregulares, por ello una suela de calidad contrastada será nuestra gran aliada en este viaje, como las que ofrece la marca Vibram. Pasaremos por piedras, tierra, a veces charcos y demás terrenos irregulares, por lo que uno de los artículos más importantes es llevar un calzado cómodo y de calidad.
También es importante llevar recambio de calcetines, de distinto grosor, para poder ajustarnos a las distintas climatologías que se dan a lo largo del día.
En los meses más fríos, cuando vamos a recoger setas, es conveniente llevar ropa térmica así como un forro polar y una chaqueta que nos abrigue bien en caso de frío extremo. Siempre hay que llevar una mochila con nosotros donde no falten guantes, gorro y bufanda. La ropa exterior, tanto chaqueta como pantalones, si es posible deben de ser impermeables, ya que nos encontraremos en zonas húmedas a la vez que cuando se sale temprano el rocío humedece el entorno y no es cómodo andar mojado.
Cuando salimos a recoger setas es imprescindible llevar con nosotros una cesta normalmente de mimbre, donde ir depositando con cuidado las setas que se recolectan con el fin de que estas puedan ir soltando esporas durante la jornada, propiciando nuevos brotes de setas en el bosque.
También llevaremos junto con nosotros una navaja, ya que algunos de los hongos se recolectan mediante un corte limpio a ras del suelo o capuchón. Es muy importante recoger las setas según la técnica adecuada para cada variedad, con el fin de estropear lo mínimo posible el entorno y facilitar nuevas brotadas de hongos.
Últimamente y dependiendo de en qué localidades, es imprescindible adquirir un pase para poder realizar una jornada de recogida de setas en dicha población, con el fin de que no se masifique la gente recogiendo, se respete el bosque y no se recolecte más cantidad de setas de la estipulada para cada persona y día. Dicha cantidad suele ser de 5K, pudiendo variar un poco dependiendo de la zona. En caso de no pagar y llevar el pase con contigo, puedes ser multado por las autoridades pertinentes.
Riesgos de salir a recoger setas
Hay que tener en cuenta que salir a recoger setas puede ser muy divertido, pero también conlleva su riesgo, pues son entornos muy amplios y muy parecidos visualmente, por lo que es importante conocer el terreno, coger referencias y no separarse del grupo, en caso de haberlo.
Es un lugar perfecto para perderse, siendo bastantes las personas las que se encuentran en esta situación todas las temporadas de setas. Por ello, siempre que se sale a recoger setas hay que llevar comida y bebida suficiente para pasar mínimo una noche. Así como algunos artículos básicos de supervivencia: Mechero, silbato, linterna o algo de cuerda pueden ser objetos de gran ayuda en este tipo de circunstancias.
Pasar una noche en el bosque perdido, puede convertirse en una pesadilla si no se tiene los materiales y recursos mínimos, como comida, bebida, abrigo, mechero y linterna.
En caso de encontrarse en esta situación hay que guardar la calma, buscar un refugio o construirlo con el material que encontremos, realizar una hoguera y esperar a que salga de nuevo el sol, momento en el cual podremos continuar con la búsqueda de alguna persona, carretera o referencia que nos ubique.
No es recomendable salir solo a recoger setas y en caso de hacerlo hay que avisar algún familiar o amigo, e indicarle el lugar exacto donde estaremos. Así en caso de no volver a la hora prevista, pueden poner en alerta a las autoridades pertinentes e indicar la localización aproximada. Un silbato es un artículo fácil de llevar y que nos puede permitir indicar nuestra posición.
Algo que siempre hay que llevar con nosotros cuando salimos al bosque o cualquier medio rural, es una simple bolsa, para llevar todos los residuos que generados durante nuestra estancia. Es imprescindible cuidar el medio ambiente e intentar dejarlo igual o mejor de como se encontraba al ir a recoger setas. Desde Panes de setas abogamos por un uso de los bosques y espacios naturales responsable, y en armonía con el medio, primando siempre el bienestar de los animales que lo habitan así como la flora que lo compone.