En 1992, Terence McKenna, escritor y micólogo referente histórico en el mundo de las setas y hongos alucinógenos -del que se ha hablado en artículos anteriores- presentó la teoría del mono dopado, en la cual se recogen hechos que podrían explicar la famosa hipótesis del eslabón perdido.
¿En qué consiste la teoría del mono dopado?
Esta teoría defiende que el salto evolutivo de Homo erectus a Homo Sapiens fue provocado por el consumo de hongos psicodélicos. Por lo que podría suponer una respuesta plausible a la eterna pregunta de cuándo y cómo se originó el primer hombre erguido. Fue cuestionada durante muchos años, ya que se la consideraba demasiado descabellada porque el consumo recreativo de hongos alucinógenos no estaba bien valorado por la sociedad.
Terence McKenna mantenía la hipótesis de que las setas desempeñaron un papel muy importante en la evolución de la especie. Este micólogo mantenía que el consumo de hongos y setas alucinógenas agudizaba la vista y estimulaba el deseo sexual. Así mismo, también se caracterizaba por un efecto profundo en el cerebro, concretamente, en la parte que controla el lenguaje, generando alucinaciones e incluso propiciando experiencias religiosas.
Datos curiosos sobre la teoría del mono dopado
Se empezó a dar mucha importancia a la recolección de hongos y setas alucinógenas para investigar los posibles efectos que generaba en aquellos que la consumían. A raíz de ello, empezaron a publicarse nuevos estudios que aseguraban que estas variedades poseen efectos medicinales para tratar algunos problemas relacionados con la salud mental.
Propició un mayor interés científico a la hora de analizar los efectos psicodélicos que producían muchas sustancias en la mente humana. Bien es cierto que no es un tema que se haya llegado a profundizar, aunque en la actualidad parece que cada vez se llevan a cabo más estudios para encontrar su verdadero origen.
No solo McKenna estaba de acuerdo con esta teoría, desde hace unos años el micólogo Paul Stamets recogió su testigo decidiendo seguir con dicha investigación, en la que asegura que esta hipótesis tiene un análisis muy plausible para la repentina evolución del homo sapiens.
Actualmente, sigue siendo una teoría no probada, pero diferentes hallazgos de la ciencia en los últimos años, hace que cada vez sea mejor valorada, ya que sí se ha demostrado que los efectos psicodélicos aceleran el crecimiento y desarrollo cerebral.
Negativa hacia la teoría The Stoned Ape
Como en toda investigación científica no probada, son muchos los que han manifestado una constante animadversión, ya que se creía que McKenna solo se apoyaba en suposiciones propias y no en hechos reales que pudieran ser demostrados con total exactitud.
Muchos escritores que se consideraban colegas de Terence, no apoyaban su tesis cuestionando la existencia de pruebas en su descubrimiento, alegando que McKenna tergiversó los hallazgos de Fischer y Hill en los que se recogía que en realidad el consumo de estas sustancias alteraba la percepción y no la agudeza visual.
Independientemente de que esta teoría sea cierta o no, lo que sí se conoce es que las setas y hongos alucinógenos están constituidos por sustancias psicoactivas, como la psilocibina, psilocina, baeocistina y norbaeocistina, haciendo posible las alucinaciones.